-¿Eres tú real?
-No, solo soy
una ilusión que has creado, para no sentirte solo. Para sentirte especial.
-Pero te ves tan
real, tan hermosa. Puedo tocarte, olerte, besarte. Debes de ser real.
-No lo soy, pero
eso no me impide amarte con todo mi corazón.
-Quiero que me
ames toda la vida.
-Eso no lo puedo
hacer.
-¿De qué me
sirve que me ames, si no es para siempre?
-En vida no
puedo amarte para siempre, pero en muerte para toda la eternidad.
-Me haces muy
feliz, hermosa, bella, mujer de mis sueños. Ven y dame un beso.
-Déjame amarte
por siempre.
-Hay un problema, estoy
vivo.
-Volemos,
saltemos, choquemos contra el suelo y amémonos hasta que el tiempo deje de ser
tiempo.
-¿Por siempre?
-Sí, mi cielo.
L.D.M.L
L.D.M.L